Yo sí, me sorprende como rodea cada diente y desde que entre a odontología (probablemente a ti también te sucede) no puede dejar de observar la boca de las personas. Dentro de lo que observo es la encía de las personas. Muchos se pueden fijar si los dientes se ven bonitos o blancos, pero si la encía esta enferma/con patologías o en casos de sonrisa gingival todo el panorama en general cambia.
Pero como veíamos en el blog pasado, quiero ver la correlación de las características clínicas y microscópicas que hacen que nuestra encía sea tan diferente en cada persona.
Okay, comencemos...
El color de nuestra encía puede variar según la raza, pero generalmente la literatura nos dice que un color sano sería rosa pálido, OJO algunas veces se ve más oscura, morada, se ven manchas en ciertas zonas y no siempre quiere decir que suceda algo malo en tu encía. No quiero que llegue un día a consulta contigo un paciente veas su encía pigmentada y saltes a conclusiones trágicas. Te explicaré de que depende el color de nuestra encía:
Ahora esto aplica en encía marginal y en encía insertada como explicaba en el blog pasado
Recuerda que la encía insertada termina en la línea mucogingival y se continua hacia la mucosa alveolar, está generalmente es roja y brillante y es epitelio plano aqueratinizado o no queratinizado, aquí la mucosa también se conoce como Mucosa de Revestimiento.
Otro factor muy influyente para la pigmentación de nuestra encía es la presencia de Melanina. Esta esta presente en tu piel, ojos y SI TAMBIÉN TU ENCÍA. Básicamente mientras más melanina produce tu cuerpo más pigmentación presenta y viceversa mientras menos melanocitos existan más claro.
Existen tratamientos estéticos para eliminar esta melanosis gingival (no es patología!! Es genético) aunque se realizan tratamientos, recuerda que esto es gracias a los melanocitos, así que tiempo después el color volverá. No afecta en lo absoluto, es nada más que estético el fin de querer remover la pigmentación.
Esta depende en gran parte por la forma de nuestros dientes y su alineación. Recuerda que nuestra encía marginal envuelve como un collar cada diente. Cuando un diente esta desviado se logra notar los contornos engrosados por tratar de mantener esa media luna la encía marginal.
Algo muy importante y que nos indica también que hay salud periodontal es la forma de nuestras papilas, en dientes anteriores debe mantener una forma piramidal y en dientes posteriores es algo más aplanada. Cuando se empieza a perder esta forma o incluso vemos contactos interproximales abiertos, podemos sospechar claramente de algún grado de periodontitis.
Debe ser firme y elástica, excepto la marginal que podemos sentirla más blanda y libre.
Mucha literatura dice que es como cascara de naranja, por la presencia de un ligero puntilleo en la encía insertada. Creo que esto es muy variable y tendrías que tener un súper ojo para realmente apreciarlo. Mi recomendación sería más bien que nunca este lisa y brillante, por que esto es signo claro de gingivitis o periodontitis, las dos patologías más comunes en enfermedades periodontales.
Ultimo, pero no menos importante… la encía se basa mucho por la altura del hueso adyacente. Quiere decir que si el hueso se pierde la encía ira persiguiéndolo. Una Doctora de mi facultad me decía que eran como unos novios… a donde se va el novio (el hueso), la novia iría tras él (la encía). Es por eso que en ciertos casos podemos ver mucha exposición radicular donde la encía emigro tras la perdida de hueso.
Aquí concluye este bello tema de encía, espero te haya gustado.
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¡Nos vemos en el próximo blog!
1. Carranza, Newman. Periodontología clínica. Editorial Mc-Graw Hill Interamericana. 8° Edición. 1998. Capítulo 1: La encía: 14 - 32.
2. Gargiulo AW, Wentz FM, Orban B. Dimensions and relations of the dentogingival junction in humans. J Periodontol 1961; 32: 261 - 267.
3. David L. Cochran, Joachin S. Hermann, Robert K. Schenk, Frank L. Higginbottom and Daniel Buser. Biologic width around titanium implants. A histometric analysis of the implanto-gingival junction around anloaded and loaded nonsubmerged implants in the canine mandible. J Periodontol. February 1997; Vol. 68; Nº 2: 186 - 197.